domingo, 26 de mayo de 2013

Cómo sonarse la nariz con educación

Con la llegada de la primavera llegan también las alergías. Los que las sufrimos con insistencia sabemos de lo inoportuno de estornudos, congestiones, toses y demás incovenientes que nos pueden poner en un aprieto durante un acto social si no sabemos como solucionarlo "con estilo".
Es norma de cortesía tener la nariz muy limpia, y resulta muy feo dejar que se llene de mocos. Por lo mismo, hay que limpiarla a menudo y ahí vienen nuestros problemas.
Es muy descortés hurgar insistentemente en las narices con el dedo, y mucho menos jugar con el resultado de la "prospección" esto puede causar profundo malestar en quienes lo ven.
Es una grosería limpiarse los mocos con la mano, pasándola por debajo de la nariz, o con la manga o el vestido.
Siempre hay que servirse del pañuelo para sonarse, y nunca de otra cosa; y al hacerlo, cubrirse o al menos, si se está con pocas personas, y se puede volver fácilmente la cara de la vista de los otros, y/o sonarse aparte sin ser visto.
Al sonarse hay que evitar hacer ruido con la nariz, sonar demasiado fuerte, soplar demasiado fuerte con las narices, y hacerlas resonar, pues eso es de muy mal gusto.
Cuando se está a la mesa, es conveniente levantarse, no es agradable para los demás comensales.
Antes de sonarse es descortés estar mucho tiempo sacando el pañuelo; y es faltar al respeto hacia las personas con quienes se está desplegarlo por diferentes partes para ver cuál se va a utilizar. Hay que sacar el pañuelo del bolsillo y sonarse rápidamente, y de forma que casi no puedan advertirlo los demás.
No hay que examinar el pañuelo después de haberse sonado; es conveniente doblarlo en seguida y meterlo de nuevo en el bolsillo.
No es educado mantener el pañuelo en la mano ni ofrecérselo a algún otro, para lo que sea, aunque esté completamente limpio. Con todo, si alguna persona lo pide y urge dárselo, entonces se puede hacer.
Cuando uno nota que va a estornudar, no hay que impedirlo, sino que conviene volver el rostro a un lado, aunque sea poco, y cubrirlo con el pañuelo, y luego estornudar suavemente y con el menor ruido posible.

jueves, 9 de mayo de 2013

Las Azafatas

La labor de las azafatas en un acto es fundamental para su correcto desarrollo. Para ello la formación de las mismas es fundamental, debe conocer perfectamente el protocolo y la empresa o entidad a la que representan, su aspecto debe ser cuidado y su actitud profesional en todo momento.
Distinguimos varios tipos de azafatas:

-Azafata de Protocolo: recepción de invitados, acompañamiento y presentación, atención a autoridades, enlace entre responsable de protocolo, atenciones a ponentes, entrega de obsequios...

-Azafata de Congresos: auxiliar de protocolo, ayuda en la organización, se encarga del hospitality desk, preparación y entrega de documentación, registro de asistencia, control de salas, recibimiento y acompañamiento, manejo de medios audiovisuales, pass control, atención en los puntos de información...

-Azafata de Ferias: ayuda en la organización, recepción de personas, atención al público, explicaciones de los productos, planificación de encuentros entre vendedores y clientes, control de entradas y salidas, control de stand, venta de productos, entrega de obsequios, venta de productos...

-Azafata de Imagen: cada empresa y producto requiere unos rasgos determinados que son asociados a la marca. Normalmente son personas altas, guapas, elegantes y saben desenvolverse con soltura.

domingo, 5 de mayo de 2013

Consejos para hablar en público.

Si en algo coincidimos todos es del miedo que sentimos la mayoría a dirigirnos al público, miedo causado por la posibilidad de hacer el ridículo. La mejor forma de superarlo es la práctica, y pensar que nos estamos dirigiendo a un grupo de amigos. No todos somos grandes oradores, pero sí que podemos ser unos oradores amenos y eficaces, si hacemos llegar nuestro mensaje de forma cordial, clara y efectiva.
Para lograr nuestro objetivo, podemos dar algunas pautas básicas a tener en cuenta:
1. Debemos saber cuándo empezar y cuándo terminar, e incluso improvisar. Si vemos que el público está muy aburrido, podemos tratar de acortar el discurso. Pero cuidado con las improvisaciones, si no estamos convencidos de cómo vamos a resolver la situación es mejor ceñirse al guión.
2. Qué es lo que queremos decir y transmitir. Hay que tener claro el objetivo del discurso y sus puntos fundamentales, para hacer llegar el mensaje correctamente y que sea comprensible por el público.
3. Cómo hacerlo llegar. Debemos "interpretar" el papel de forma convincente para que el público reciba y crea el mensaje. Hay que saber captar su atención y mantenerla. Mucha gente confunde esto con ser graciosos, pero el truco está en analizar el tipo de público al que nos dirigimos y establecer que actitudes y palabras serán más convenientes.
Una forma de perfeccionar nuestro discurso o intervención pública, es practicar. Delante del espejo, grabándolo en una cinta y escuchándolo, con amigos que pueden hacer de críticos, etc. Pero no ha de olvidarse del mayor protagonista: la voz. Hay que cuidar la entonación (module y dirija bien su voz), el tono (claro y relajado), el volumen (ni bajo, que no se oiga nada, ni gritando, atemorizando al público), el ritmo (no hable muy pausado, ni rápido como con ganas de terminar lo antes posible) y vocalización (pronuncie correctamente, se le entenderá mejor). Evite pausas, tartamudeos, repeticiones, vacilaciones y alargamiento de palabras (tipo eeeehhhh, queeee, buenoooo, etc).
La preparación del discurso con antelación es imprescidible, pero eso es otra tema que trataremos más adelante.